Simple y llanamente, por nuestra seguridad y salud, no queremos la gasolinera de la Avda. La Rioja en el centro urbano de Haro.
“La gasolinera lleva toda la vida, no haberte comprado un piso ahí”
Debatir sobre quién o qué estaba antes allí, no hace que desaparezca el peligro, así de claro.
A fecha de hoy, existen viviendas, comercios, un Colegio público (desde 1934), un Banco, la Oficina Central de Correos, dos academias, dos parques, la Estación de autobuses, los Juzgados, la Basilica de Ntra. Sra. De La Vega, un Hotel… en un radio de menos de 100 metros cercando la gasolinera. Habitar, estar, ir de compras, conducir, llevar a las y los hijos al Colegio, pasear o pasar por esa zona y las manzanas circundantes es un gran riesgo. No es solo un problema de quien vive cerca de allí, ni de si ha comprado, alquilado, le han regalado, ha heredado o ha ocupado una vivienda estando la gasolinera allí.
Riesgo de explosión e incendios, emisión de gases inflamables y cancerígenos al ambiente (encerrado entre edificios), contaminación del subsuelo,… riesgos que no solo dependen de las medidas de seguridad que desde la gasolinera pudieran estar implementando o no. Cualquier hecho, sea fortuíto (cortocircuitos, incendios cercanos, choque de vehículos…) o intencionado (acción terrorista, incendios provocados…) hace de la ubicación de esta gasolinera un riesgo inasumible para los habitantes de Haro, riesgos que se minimizarían de estar esta en el extrarradio.
Así, el cortocircuito que se dio en plena tormenta hace dos semanas en el cableado sobre la gasolinera evidenció que existen muchas razones para estar muy-muy preocupados. 20 minutos tardaron en cortar la corriente eléctrica de forma manual, minutos durante los cuales las chispas y explosiones en la sección cortocircuitada no cesaron, minutos en los cuales el calor que este emitía y el riesgo de incendio hacían esperar lo peor, minutos en los que, por fortuna, el cable no cayó sobre la acera o uno de los surtidores, minutos de angustia para los vecinos y vecinas de la zona y los del portal colindante que se encontraban atrapados siendo mayor el riesgo quedarse esperando una explosión que salir bajo los chispazos… minutos tras los cuales los bomberos procedieron a rociar de espuma para refrigerar el pavimento bajo el que se encuentran los depositos de la gasolinera. ¿Existe o no existe un riesgo cierto?
Un coche en dirección contraria se empotra contra uno estacionado y evita que choque contra el surtidor de la gasolinera situada en el centro de Haro
¿qué hubiera pasado de haberse dado este incidente o cualquier otro similiar estando el camión cisterna cargando los depositos al tiempo que emanan gases?¿o estando la estación de servicio abierta?¿tiene la gasolinera un plan para estas emergencias?¿está el pueblo preparado para ello?
No es este, además, un incidente aislado. Un coche, conduciendo en contra dirección, estuvo a punto de colisionar con uno de los tres surtidores de la gasolinera y ocasionar una desgracia, si no es por que se topó con otro aparcado en la plaza reservada para personas con movilidad reducida.
Y día a día, los habitantes, comprobamos que a cada minuto se dan fallos en la seguridad, sucesos e incidentes que podrían provocar un grave accidente.
No pretendemos una acción o guerra contra las personas propietarias, ni trabajadores de la Estación de Servicio, sino de solucionar de una vez por todas este tema que durante tantos años llevamos reivindicando y que ningún Gobierno local ni Regional ha atendido.
Un cambio de tipo de negocio, su traslado a extrarradios… cualquier cosa que haga desaparecer el riesgo al que actualmente estamos expuestos de forma directa todos los habitantes de Haro.
Por nuestra seguridad, ¡Gasolinera fuera del casco urbano ya!
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